martes, 10 de julio de 2007

VERANITO POR FIN!!!!

Por fin empezó el veranito para mí, ya se acabaron las jornadas de 14 horas de trabajo en las oposiciones, si si, 14 horas, como esclavos nos han tenido. El primer día de las oposiciones todos íbamos muy guapos pero al 7º las ojeras nos llegaban a los pies.
Ha sido toda una experiencia, pero espero no volverla a repetir. Aparte del cansancio y de los malos rollos que se viven entre tribunales y con la gente de tu mismo tribunal, aquello es una secta de la que solo te escapas cuando acaba el proceso.

Me levantaba a las 5:30 de la mañana, las calles no estaban puestas todavía y llegaba a mi casa más tarde de las 9:30, ya de noche. Empecé a vivir una realidad paralela, una realidad que sólo compartía con la gente de los tribunales. No sabía que pasaba en el mundo, no hablaba con ninguna amiga porque las fuerzas eran pocas y las reservaba para corregir, no sabía en qué ocupaba el tiempo el marinerito, ni veía a mi familia.
No sé que le ha pasado estas semanas a Melinda la de “Entre fantasmas”, ni a mis “Mujeres desesperadas” favoritas.

Durante el proceso, hay discusiones con los miembros del tribunal, no todos pensamos igual ni valoramos igual. He tenido que hacer serios esfuerzos por mostrarme tolerante ante puntos de vista que no entendía ni entenderé nunca, aunque reconozco que a veces me salía el genio sin poderlo evitar.
Después cuando las notas se ponen, vienen a pelearse contigo los opositores. Por muy justos que hayamos sido, nunca llueve a gusto de todos y hay personas que consideran que su nota tenía que haber sido un 10 en vez del 4 que le has puesto. Y a veces te dan ganas de decirle: “pero tía que tu examen no había por donde cogerlo, que era de pena, cambia de academia o de temario”. Pero claro, eso no se lo puedes decir así.

Uno de los días en el que los que habían aprobado entregaban los méritos (títulos, cursos, vida laboral…) una de las chicas que aprobó y cuya exposición me encantó, me dice que si le puedo explicar en cual de las 3 pruebas falló, porque ella se esperaba mas de un 7. Cojo todas sus plantillas, me pongo a mirar y le explico que el fallo había estado en su plan de trabajo, que le faltaban muchos ítems por desarrollar.
Cuando ya le queda todo claro, decide hacerme una confesión que hubiera preferido no oír.
- ¿Sabes?, cuando vi al tribunal que me tocaba, me quedé tranquila, no sé todos me inspiraban confianza, bueno todos menos tú.
- ¿Menos yo? ¿Por qué? (no sabía dónde meterme, totalmente sorprendida y perpleja)
- No sé. Yo me decía a mi misma: uy… esa chavalita tan joven, que mala espina me da... Y se lo comenté a una amiga, le dije: a mi la del piercing no me gusta nada, a saber que me pregunta.
(Yo seguía sin pestañear, mira que la gente es atrevida eh!, en que momento pensó ella que podía decirme todo eso y que no pasaría nada)
Y siguió:
- Pero mi amiga (que te conoce) me dijo que no me preocupara, que ella había
trabajado contigo y que eras muy buena.

Doy gracias a esa amiga en común que tenemos la atrevida ésta y yo, pero no puedo dejar de pensar porque para muchas personas tengo una apariencia tan negativa.

3 Dí lo que quieras:

Imogen dijo...

Yo de ti la suspendo, ahi mismo, delante de su cara, pero que se ha creido!!! jajajaja

Hala mija, ahora a descansar, que está claro que te lo has merecido.
Por todo lo que dices deduzco que eran oposiciones a maestro, no???

Neil dijo...

Si Imogen, a maestros atrevidos...
que tal fue lo tuyo? en tu blog no he visto nada relacionado con el tema.
Besotes

Imogen dijo...

Lo mío....me he quedado a 0'91 centésimas de pasar, pero con una pregunta que se impugne ( cada año caen dos o tres y este año hay más impugnables) ya estoy dentro, así que...a por ellos, tengo esperanza, y sino, no pasa nada. Tengo la conciencia tranquila porque hice todo lo que pude.
Gracias por preguntar.